martes, 11 de noviembre de 2008
El Más Feo se Fue al Cielo
Porque de seguro está ya descansando y, sorpresivamente, tiene de vuelta sus dos ojitos, su patita, y lo mejor : ya no tiene dolor.
Lo más importante es que ya no será objeto de burlas ya nadie lo puede mirar con repulsión. Su dueño lo puso a competir para ver si con el dinero que se ganaba en el concurso del perro más feo podía hacer algo muy especial: pagar los gastos de quimioterapia de Gus. Porque el más feo, tenía cáncer del hígado y en la piel. Eso fue en verano este año...ganó. Pero su reinado duró poco. El lunes, con todo el dolor del mundo, su amo lo ´´puso a dormir´´. No podía respirar ya, tenía mucho dolor, el cáncer lo había arropado. Su viejo amigo de nueve años y que tan feliz lo hizo, con su caríño y su ternura...( sí, era feo por fuera solamente) se despedía mirándolo con su único ojito, y cómodo entre sus brazos le decía adiós.
Tengo que reconocer que lo único que me separa de todos, hasta de mis mejores amigos, es la forma en que a veces se refieren a los animales. Entiendo que no tienen la culpa. Fueron criados así. Mientras viva, trataré de honrar la creación deshonrada. ¿Saben qué? No me importa ir al infierno por eso. ¡ Ah ! Y no pongo su foto aquí para que se rían del perrito más feo...sino para que los que pueden hacerlo piensen que Dios lo creó...¿Un error de Dios?
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