Abril, por muchas razones, es mi mes.Cosas malas y buenas me han sucedido en este mes, y guardo muchos recuerdos importantes en mi corazón.Es algo que ocurre cuando llega, el olor, la luz del sol, el aire, los pájaros, las calles, todo es especial en abril.Vivimos tan apresurados que dejamos pasar los recuerdos que nos disparan el corazón y el cerebro.Recuerdos que nos inflan el alma, que nos hacen sentir mal o bien, pero vivos.En este mundo tan lleno de cosas que no tienen sentido, es nuestro espíritu que, ligado como está a lo Divino, nos susurra al oído: ´´¡ Detente !´´ Debemos escucharlo y disfrutar de ese silencioso susurro que nos hace estremecer,porque nos comprueba que estamos vivos, que hemos vivido y que seguiremos viviendo hasta que nos toque unirnos a la Eternidad.
Vamos a detenernos, escuchemos la música que nos canta el alma, al pequeñín que llevamos dentro. Recordemos, repasemos nuestra vida, honremos a los que ya no están,reviviendo los momentos que pasaron junto a nosotros.No debemos estancarnos en el pasado, pero sí podemos estacionar el alma un rato en las aguas frescas de las remembranzas. De esta forma, sin miedo a lo que encontremos en lo que ya hemos vivido, podremos seguir adelante con las lecciones aprendidas y más fuerzas para caminar.
Vamos a detenernos, aspiremos las flores de nuestra vida,encontraremos espinas que tal vez nos hieran un poco, pero, ¿No es maravilloso que podamos revivir lo pasado? ¿ No resulta fantástico que aún el más desagradable de los recuerdos pueda recrearse ya sin permitir que nos haga daño?
Aprendamos a ´´aprender´´ de nuestra propia enciclopedia. Te aseguro que encontrarás soluciones a tus problemas con solo ´´estudiar´´ problemas pasados. Al fin y al cabo...¿no se resolvieron ya?
Vamos a detenernos y a valorar lo que hemos hecho. Te darás cuenta de cuán fantástica ha sido tu vida, aún el la adversidad.
...Por algo Dios te permite recordarla...
No hay comentarios:
Publicar un comentario